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Teresa de Fortuny y Xavier Bohigas

Escudo antimisiles en la base de Rota: un nuevo impulso a la carrera armamentística

El cinco de octubre de 2011, el presidente del gobierno español, acompañado del secretario de Defensa norteamericano y el secretario general de la OTAN, anunciaba que la base de Rota albergará, a partir de octubre de 2013, el componente naval del escudo antimisiles de EEUU y destacaba los beneficios que supondrá para la población española. En este trabajo hacemos una descripción del escudo e intentamos desmentir aquellos supuestos beneficios y señalaremos las consecuencias negativas. Veremos que el objetivo último en la planificación temporal del escudo es el establecimiento de un enorme escudo antimisiles para todo Occidente. Esta obsesión de Occidente por la «protección» sólo puede desembocar en un aumento del recelo y la desconfianza por parte de otros países y, en definitiva, en un incremento del armamentismo.

El proyecto de defensa de misiles en Europa

El proyecto de escudo antimisiles en Europa planificado en 2007 por la Administración Bush preveía la instalación de radares en la República Checa y una base de lanzamiento de misiles en Polonia. En marzo de 2009 el Parlamento checo rechazó la instalación de los radares. Paralelamente, Rusia manifestaba su malestar por la instalación de misiles en Polonia, muy cerca de su frontera. Esa coyuntura, a la que hay que añadir el coste elevadísimo del proyecto, obligó a la administración norteamericana a abandonar ese proyecto y diseñar uno nuevo.

El secretario de Defensa, Robert Gates, y la Junta de Jefes de Estado Mayor recomendaron al presidente Obama que revisara el plan anterior y Obama, el 17 de septiembre de 2009, siguiendo estas recomendaciones, aprobó la puesta en marcha del European Phased Adaptative Approach (EPAA), el nuevo proyecto de escudo para Europa en cuatro fases [1]. Este nuevo planteamiento se basaba en la evaluación de la amenaza de misiles procedentes de Irán.

En ese momento, los servicios de inteligencia norteamericanos calculaban que el ritmo de desarrollo en Irán de misiles balísticos de corto y medio alcance era más rápido de lo previsto previamente, mientras que la capacidad potencial de misiles balísticos intercontinentales (ICBM) iraníes se desarrollaba más lentamente de lo que se había calculado [2]. Para el gobierno de los EE.UU., los afectados a corto plazo por la amenaza de misiles iraníes son los aliados de EEUU, tanto en Oriente Medio como en Europa, junto con el personal estadounidense civil y militar (y familias) desplegado en ambas zonas (y, aunque no lo explicitan, las bases norteamericanas esparcidas por los dos territorios). No se considera a Irán como una amenaza a corto plazo para el territorio y población de los EE.UU.

Irán tiene misiles, los Shahab-1, Shahab-2 y Shahab-3, de un alcance inferior a los 1.500 km. Según un informe del Departamento de Defensa de EEUU [3], declaraciones oficiales iraníes sugieren que el alcance del misil Shahab-3 Variant podría llegar a los 2.000 km y que Irán tiene la capacidad para producirlos de forma masiva. Irán también está, probablemente, trabajando para mejorar la precisión de sus misiles Shahab de corto alcance.

El proyecto EPAA consiste en el despliegue en Europa, tanto en tierra como en buques, de radares e interceptores de misiles [4]. El año previsto de inicio del despliegue es el 2011 y se pretende aumentar progresivamente la zona protegida de forma que el año 2018 toda Europa quede protegida por la estructura de defensa de misiles. Está previsto desarrollar elementos del escudo en el norte y sur de Europa, se consultará a la OTAN las opciones específicas del despliegue y se intentará integrar la estructura del EPAA en los sistemas de defensa de misiles de los miembros de la OTAN.

De hecho, esta potencial futura integración ha sido muy bien acogida por parte de la OTAN y hay consenso en que el despliegue en Europa de una defensa antimisiles estadounidense debe formar parte de cualquier futura estructura de defensa antimisiles de la OTAN. Ya en noviembre de 2002 en la cumbre de Praga, la Alianza encargó un estudio para examinar las opciones de protección de las fuerzas de la Alianza, el territorio y las poblaciones, contra las amenazas de misiles. El estudio, realizado por un equipo multinacional de industrias de ambos lados del Atlántico, concluía que la defensa contra misiles es técnicamente viable y los resultados del estudio se aprobaron en la cumbre de Riga de noviembre de 2006. Es en este contexto que, en la cumbre de Bucarest de abril de 2008, se afirma que el despliegue en Europa de un sistema antimisiles de EEUU ayudará a proteger a los aliados y que deberá formar parte del sistema de la OTAN. En la cumbre de Lisboa de noviembre de 2010 se acuerda desarrollar una capacidad de defensa territorial contra misiles (de corto y medio alcance, hasta 3.000 km) y se considera que el EPAA será una valiosa aportación. En junio de 2011 los ministros de Defensa de la OTAN aprueban el Plan de Acción de Defensa de Misiles Balísticos de la OTAN para implementar a lo largo de esta década la capacidad de defensa contra misiles [5].

La posición del gobierno español queda bien clara en el documento [6] Estrategia Española de Seguridad del año 2011. Destacamos un par de párrafos muy clarificadores:

«España apoya los esfuerzos para limitar la proliferación de misiles de medio y largo alcance, que permitirían el lanzamiento de armas de destrucción masiva a grandes distancias. La capacidad de defensa antimisiles debe desarrollarse.»

«La participación de España en el programa de Defensa Antimisiles de la OTAN constituye una adecuada medida de respaldo a los esfuerzos que se vienen realizando contra la proliferación de vectores de lanzamiento de armas de destrucción masiva. La proliferación de misiles balísticos representa una creciente amenaza a los estados miembros de la Alianza, por lo que es necesaria una capacidad de defensa colectiva adecuada. Con el objetivo de extender la protección del sistema a la población, el territorio y las Fuerzas Armadas de todos los países europeos de la Alianza, España participará en la configuración de dicho programa para su extensión más allá de las tropas desplegadas y se acogerá a sus beneficios».

La implementación del proyecto EPAA se realizará a través del sistema defensivo Aegis BMD, integrado en el sistema global de defensa BMDS y las fases previstas son [7]:

  • 1 ª fase (hacia el 2011), planteada contra las amenazas de misiles balísticos regionales dirigidas contra los aliados europeos de EEUU y el personal estadounidense en Europa y consistirá en el despliegue de un radar terrestre y barcos equipados con Aegis BMD. En marzo de 2011 los EEUU ya anunciaban el despliegue del buque USS Monterey en el Mediterráneo como inicio de la fase.
  • 2 ª fase (hacia el 2015). Se desplegará una versión más capaz del interceptor SM-3 y se añadirá un centro terrestre de defensa con interceptores SM-3, que Rumanía ha aceptado de alojar, con el objetivo de ampliar el área protegida frente a amenazas de misiles de corto y medio alcance. En mayo de 2011 los Estados Unidos y Rumania anunciaban la elección de común acuerdo de la ubicación.
  • 3 ª fase (hacia el 2018). Se desplegará un todavía más avanzado interceptor SM-3 y se añadirá un segundo lugar terrestre de interceptores SM-3 (ya fue aprobado por Polonia en octubre de 2009) para hacer frente a amenazas de misiles de corto y medio alcance. En julio de 2010 los EEUU y Polonia firmaron el acuerdo para que Polonia albergue la instalación y en abril de 2011 el presidente polaco firmó la ley que ratifica el acuerdo.
  • 4 ª fase (hacia el 2020). Se desplegará una nueva versión del SM-3 que mejorará la capacidad de hacer frente a misiles de alcance medio y también a futuras amenazas potenciales contra los EEUU, de misiles ICBM procedentes de Oriente Medio.

En definitiva, el escudo irá extendiéndose a través de sucesivas ampliaciones e interconexiones hasta cubrir a todos los aliados de EEUU.

Ballistic Missile Defense System (BMDS)

La estructura del sistema de defensa de misiles balísticos (BMDS) [8] está constituida por

  • sensores y radares en red, instalados en tierra y en buques, para detectar y seguir el objetivo (misil atacante)
  • misiles interceptores, ubicados en tierra y en buques, para destruir los misiles balísticos atacantes.
  • mando, gestión, control y red de comunicaciones que establezca la conexión entre los sensores y los misiles interceptores

 

Hay dos formas diferentes de destrucción del misil atacante: el impacto directo (la tecnología llamada hit to kill) y la explosión del misil interceptor.

El BMDS tiene dos componentes, el naval (Aegis BMD) y el terrestre (GMD).

Aegis Ballistic Missile Defense (Aegis BMD)

Aegis BMD [9] es el componente del BMDS que está ubicado en los barcos. Es un sistema desarrollado y fabricado por Lockheed Martin. Integra el radar SPY-1, la lanzadera vertical de misiles MK41 instalada en los buques, el misil interceptor SM-3 (Standard Missile 3), fabricado por Raytheon, y el sistema de control y mando. El misil SM-3 tiene un alcance efectivo [10] de 500 km. La mayor parte de los buques estadounidenses equipados con Aegis BMD son destructores Arleigh Burke [11] diseñados y fabricados por Northrop Grumman.

El Aegis BMD capacita a los barcos para usar la tecnología hit to kill de interceptación y destrucción de misiles de corto y medio alcance. También les permite hacer el seguimiento y vigilancia de misiles balísticos intercontinentales, en interconexión con otros elementos del BMDS.

El sistema Aegis permite interceptar un misil durante las fases media y final de su trayectoria endoatmosférica [12] (dentro de la atmósfera).

Actualmente hay más de 20 barcos de la Marina de EEUU equipados con el sistema Aegis. También lo han incorporado las armadas de Australia, Japón, Noruega, Corea del Sur y España [13], si bien en algún caso con versiones diferentes de la que llevan los barcos estadounidenses. Este es el caso de las fragatas F-100 españolas.

El funcionamiento del sistema es el siguiente: cuando surge la amenaza de un misil balístico, un radar situado en tierra o en un barco lo detecta y empieza a hacer su seguimiento y el sistema de control calcula la trayectoria del misil interceptor y el punto de colisión con el misil atacante. Se lanza un misil interceptor desde un barco y el sistema de comunicación del buque guía el misil hacia el lugar previsto de interceptación. El misil recibe continuamente datos actualizados desde el barco para afinar la trayectoria de interceptación. La tecnología de destrucción del misil atacante es hit to kill. La energía disipada en el impacto es superior a 130 MJ de energía cinética (equivalente a la de un camión de 100 toneladas con una velocidad de 190km / h).

De enero de 2002 a septiembre de 2011 se han realizado 26 pruebas reales con misiles interceptores lanzados desde buques, en 21 de las cuales se ha conseguido el objetivo, según informa la Missile Defense Agency  [14].

El programa Aegis-BMD está financiado [15] principalmente por la Missile Defense Agency, pero la marina de los EEUU aporta cantidades adicionales En la tabla 1 presentamos los presupuestos previstos para los años fiscales del período 2011-2016 (los presupuestos de los años 2011 y 2012 están solicitados y los otros están programados). Las cantidades incluyen investigación, desarrollo, pruebas, construcción militar, gestión y mantenimiento. La parte del león de los presupuestos corresponde a investigación, desarrollo y pruebas. En la tabla 2 presentamos las previsiones, hasta el año 2020, de existencias de barcos equipados con Aegis-BMD y de misiles SM-3. Algunos de los barcos serán de nueva construcción y otros serán adaptaciones de cruceros y destructores ya existentes. Algunos observadores militares, pensando en el EPAA, manifiestan preocupación porque las demandas de buques equipados con Aegis-BMD, por parte de mandos militares regionales, aumentan más rápidamente que el número de barcos disponibles. Centran esa preocupación, sobre todo, en la situación durante los próximos años, antes de que se establezcan las dos instalaciones proyectadas de Aegis terrestres en Europa.

Tabla 1. Previsión de los gastos que la Missile Defense Agency dedicará al Aegis-BMD.

Las cifras están en millones de dólares.

2011

2012

2013

2014

2015

2016

2.255,7

2.945,7

3.337,2

3.200,9

3.654,7

3.739,3

Tabla 2. Previsión de existencias de barcos equipados con el sistema Aegis-BMD y de misiles SM-3.

2009

2010

2011

2012

2013

2014

2015

2016

2017

2018

2019

2020

Barcos equipados con Aegis-BMD

18

20

23

28

32

36

38

41

42

43

43

43

Misiles SM-3

63

89

111

129

155

201

263

341

428+

500+

513+

515+

Ground-based Midcourse Defense (GMD)

Es el componente terrestre del BMDS con la función de proteger a los EEUU [16]. Permite interceptar y destruir misiles balísticos de alcance medio y de largo alcance durante el curso medio de su trayectoria. Los misiles interceptores están ubicados en Fort Greely, Alaska, y en la base Vandenberg Air Force, California. Los puestos de mando están en Fort Greely y Colorado Springs. Utiliza misiles interceptores exoatmosfèrics (trayectoria fuera de la atmósfera) con tecnología hit to kill.

Escudo antimisiles de Israel

EEUU e Israel son los países más obsesionados con la amenaza de Irán. En el caso de Israel, debido a la hostilidad y la proximidad entre los dos países. Por eso conviene recordar que Israel tiene su propio sistema de defensa antimisiles. Se inició durante la década de 1980 y se aceleró en 1991 a raíz de la Guerra del Golfo. Está constituido por dos sistemas complementarios: el Arrow y el Iron Dome. El Arrow-2 es un sistema diseñado para interceptar misiles balísticos [17] y desde el año 2009 se está trabajando en el proyecto Arrow-3 para interceptar misiles lentos de crucero [18]. El Iron Dome está diseñado para destruir proyectiles de alcance corto lanzados desde la Franja de Gaza y desde el sur del Líbano. Los sistemas Arrow y Iron Dome se han desarrollado con la colaboración y ayuda norteamericana y de empresas de seguridad estadounidenses.

En junio de 2011 el jefe de la Agencia de Defensa de Misiles del Pentágono declaró que el sistema israelí de defensa se ​​integrará dentro de un conjunto de defensa regional planificado por EEUU. Las baterías de misiles israelíes también podrán proteger países árabes aliados de EEUU, pero con los que Israel no tiene relaciones diplomáticas. El sistema israelí reforzará la capacidad de EEUU para proteger sus fuerzas en Oriente Medio [19].

¿A quién beneficia la implementación del escudo antimisiles?

Muy especialmente a tres grandes empresas del sector de defensa, Lockheed Martin, Raytheon y Northrop Grumman. Empresas que han estado siempre muy bien representadas en los dos influyentes comités federales, la Defense Policy Board y la Defense Science Board, que asesoran al Departamento de Defensa de EEUU sobre estrategias, políticas y programas de defensa. La mayoría de los miembros de estos comités son altos cargos de las empresas del sector de defensa. Es muy habitual que las recomendaciones de estos comités se conviertan en la solución definitiva y sean implementadas por el gobierno.

De hecho, estas tres empresas, junto con Boeing, son las que acumulan (dentro del sector de defensa) más cargos directivos o lobbistas que han sido previamente altos cargos gubernamentales (y viceversa). Es lo que se conoce por «puerta giratoria». No es casualidad que sean también las mayores adjudicatarias en contratos de defensa del gobierno.

Es probable que todas ellas participaran en aquel equipo de industrias a quien la OTAN encargó el informe de viabilidad del escudo antimisiles.

Datos para el periodo 1997-2004 [20]:

Altos cargos del gobierno que se han convertido en ejecutivos, miembros de la junta directiva o lobbistas (desde 1997 a 2004)

Lockheed Martin

Northrop Grumman

Raytheon

57

20

23

Y para el período 2007-2009 [21]:

Miembros de los equipos directivos (años 2007, 2008, 2009) que han sido altos cargos del gobierno

Lockheed Martin

Raytheon

5 (en un equipo directivo de 10 miembros)

3 (en un equipo directivo de 12 miembros)

Hemos visto que en cada una de las fases del proyecto EPAA se prevé introducir una nueva versión del misil SM-3 y esto implica más volumen de negocio para la empresa Raytheon que lo fabrica. Es, cuando menos, sospechoso que en febrero de 2009 fuera nombrado adjunto del secretario de Defensa William Lynn [22], que había sido hasta entonces vicepresidente y lobbista de Raytheon, que en septiembre de 2009 se aprobara el EPAA y que en enero de 2010 el presidente de la sección de misiles de Raytheon, Taylor Lawrence [23], fuera nombrado miembro de la Defense Science Board. Por cierto, que el nombramiento de Lynn requirió incluso una exención de una reglamentación de la administración Obama ideada para evitar que exlobbistas trabajen en el gobierno, en cargos con jurisdicción sobre sus negocios anteriores, durante al menos dos años.

De las previsiones gubernamentales reflejadas en la tabla 2, se desprende que deberán fabricar muchos barcos que irán equipados con el sistema Aegis. Por tanto, las empresas, Lockheed Martin, Raytheon y Northrop Grumman tienen sus pedidos asegurados.

Rota alojará barcos con sistema Aegis

Rota será la base principal del componente naval del escudo antimisiles de la OTAN. Albergará cuatro destructores norteamericanos, equipados con el sistema Aegis BMD, y un destacamento estadounidense de 1.100 militares y 100 civiles. La movilidad de los buques permitirá que el sistema pueda responder a amenazas cambiantes desde el punto de vista geográfico. Dos barcos estarán navegando, un tercero en alerta en el puerto y el cuarto en reparación o trabajos de mantenimiento.

Según Leon Panetta [24], secretario de Defensa de EEUU, estos cuatro destructores no sólo tendrán la función de escudo antimisiles sino que participarán en misiones marítimas de la OTAN y en misiones de «apoyo de respuesta rápida» a los mandos estadounidenses AFRICOM (que cubre la mayor parte de África) y CETCOM (que abarca desde el Cuerno de África a Pakistán).

Cabe destacar que estos cuatro destructores tendrán base permanente en Rota. Hasta ahora los barcos que paraban en Rota tenían su base permanente en Italia.

Como lo presenta el gobierno. Como lo presentan los militares españoles

El 5 de octubre de 2011 Rodríguez Zapatero afirmó que «España […] va a participar y apoyar una iniciativa que tiene como objetivo mejorar la defensa y la seguridad de nuestros ciudadanos […] este compromiso es una garantia para la defensa del territorio español y de los españoles […] la iniciativa tendrá un impacto muy significativo en términos socioeconómicos». Concretó que este impacto económico (originado por el mantenimiento de los barcos y la presencia del personal estadounidense) se traduciría en unos 50 millones de euros anuales y la creación de unos 1.000 puestos de trabajo (directos e indirectos) [25].

Los militares españoles, sin embargo, son más directos. Hablan sin tapujos ni subterfugios. El general Miguel Ángel Ballesteros, director del Instituto Español de Estudios Estratégicos [26] declaraba que el alcance de la decisión «no puede medirse por los puestos de trabajo que cree, por importantes que estos sean» sino, sobre todo, porque «es una apuesta política clara por convertir a España en un socio leal y fiable para la OTAN y para EE UU».

Consecuencias económicas

Gastos para el Estado español

No nos han hablado nunca de los gastos que se derivarán de la instalación del escudo. Para empezar, ya antes de acoger el escudo, se ha hecho una ampliación del puerto de Rota. Se ha construido un muelle nuevo, el número 4, inaugurado en julio de 2011. También se han hecho mejoras en los muelles 1 y 2 y se harán en el muelle 3. El Ministerio de Defensa justifica [27] estas reformas ya que permitirán incrementar la capacidad de apoyo a las fuerzas marítimas de la OTAN, en el marco de los compromisos adquiridos con la Alianza Atlántica. El montante de las obras será de unos 160 millones de euros, cuyo 60% irá a cargo de la OTAN y EEUU y el  40% a cargo del Estado español. De momento, pues, la adecuación del puerto de Rota a las «necesidades» de la OTAN cuesta a los españoles 64 millones de euros.

La base de Rota alberga también el Cuartel General de la Flota española. La instalación del escudo antimisiles en la base la convertirá en un objetivo militar clave. Esto puede implicar la decisión de aumentar la seguridad de la base, con el correspondiente coste económico. Coste que se añadiría a la deuda de más de 30.000 millones de euros del Ministerio de Defensa [28], deuda que lo coloca casi en una situación de quiebra.

¿Creación de puestos de trabajo?

El millar de puestos de trabajo citados por Rodríguez Zapatero se distribuirán, según el vicepresidente Manuel Chavez [29] en 60 puestos de trabajo fijos, 100 temporales y 772 indirectos. Estas cifras son bastante cuestionables.

Si los 64 millones invertidos en obras del puerto, se hubieran destinado a la creación de empleo en sectores de economía sostenible y adecuada a las características de la zona, habrían generado puestos de trabajo realmente estables. Sería una buena alternativa a los 772 puestos de trabajo indirectos previstos por el gobierno que, caso de llegar a generarse, estarán absolutamente supeditados a las eventualidades de la permanencia del personal estadounidense en Rota. Hallamos un precedente de esto en 1979, cuando se fue de Rota más del 31% del personal estadounidense y, como consecuencia, se perdieron 114 puestos de trabajo y supuso un colapso económico a todos los niveles en la localidad [30].

La poca estabilidad de los puestos de trabajo que genera la base está demostrada a lo largo de su historia y globalmente, se ha producido una pérdida de empleo. Hasta finales de los años ochenta, la base empleaba a unos 2.500 trabajadores civiles españoles [31]. En 1997 la plantilla ya había bajado hasta 1.600 trabajadores. Y aquel año todavía se redujo más, hasta 1.200 puestos de trabajo.

El futuro se presenta aún más desfavorable con respecto a la estabilidad de empleo. En los últimos años, el gobierno de EEUU ha optado por privatizar muchas de las funciones que tradicionalmente realizaba el ejército. Y aquí se incluyen funciones de defensa, de seguridad y todo el abanico de servicios de logística asociados a una base militar. Por tanto, la posibilidad de que el gobierno de EEUU decida adjudicar a empresas privadas estadounidenses todos los servicios que actualmente realizan los trabajadores civiles locales en la base de Rota, es bastante alta. Y lo es porque esta privatización se debe, en gran medida, a los poderosos vínculos entre el gobierno estadounidense y el sector privado de defensa y seguridad (más arriba ya hemos hablado de la «puerta giratoria»). Y la privatización de servicios también podría afectar a los puestos de trabajo indirectos. En su tesis doctoral sobre Rota, M del Rocío Piñeiro afirma «… los puestos de trabajo…  pasaron a subcontratas norteamericanas» [32]. Y continúa diciendo «el tema de los despidos una vez más demuestra la dependencia total que tiene Rota de la instalación militar norteamericana, ya que estos trabajadores no pueden ser reabsorvidos al carecer la villa de industrias que tengan capacidad para recolocarlos. Uno de los principales fallos de la política económica del gobierno franquista en esta área fue no crear industrias estratégicas que supusieran un impulso para el resto de los sectores económicos dejando así Rota abandonada a la dependencia de la base». Los sucesivos gobiernos españoles no han hecho nada para cambiar esta situación de dependencia tan acusada.

¿Impacto económico positivo en la zona?

Nos dicen que habrá un aumento de la actividad económica de la zona en 51 millones de euros al año, de los que 8,4 millones correspondrían al incremento de trabajo en los astilleros de San Fernando, a causa del mantenimiento y reparación de los cuatro destructores. Siguiendo el razonamiento anterior, estas tareas de mantenimiento y reparación pueden ser adjudicadas, en un futuro próximo, a una empresa estadounidense de defensa. Y hay muchas probabilidades de que sea así, porque precisamente la empresa Northrop Grumman (la que fabrica estos destructores) tiene asignadas estas funciones de mantenimiento en EEUU.

Cuando el gobierno esgrime el argumento del impacto socioeconómico positivo en la zona, se olvida del impacto socioeconómico negativo. De hecho, la base ha originado perjuicios a lo largo del tiempo sobre la economía local y sobre la población [33]. Mencionamos algunos: Acumulación de arena en la dársena del muelle pesquero de Rota causada por el muelle militar que desvía el curso de las corrientes marinas. Malas comunicaciones con las poblaciones vecinas por el rodeo que supone bordear el recinto militar. Influencia negativa de la proximidad de la base sobre el turismo. Riesgo muy alto de accidentes debido a los vuelos rasantes de aviones. La instalación militar ocupa las tierras más fértiles. Riesgo de accidentes por el carácter militar del recinto, etc.

Cabe señalar que el consumo fuera de la base de los residentes estadounidenses, se restringe a los productos que no pueden encontrar en la base, porque las tiendas del recinto (supermercados, etc) tienen precios mucho más baratos que en el exterior.

La economía de la zona ha estado y está excesivamente vinculada y supeditada a la existencia de la base. Más del 50% de la actividad económica [34] está relacionada con la base. Aparentemente, esto se podria considerar como un efecto socioeconómico positivo. Pero realmente es un grave error que la economía de la zona dependa tan fuertemente de un factor coyuntural como es la presencia de la base. Si un día las autoridades norteamericanas deciden abandonar la base, esto significaría un colapso para la región. La actividad economía debe estar ligada a la economía real y productiva local.

Impuestos municipales perdidos

Desde la llegada de los estadounidenses, el consistorio de Rota ha tenido que incrementar sus servicios y prestaciones, pero no ha recibido ningún tipo de compensación, debido a la exención tributaria de que aquellos gozan. El Tratado de Amistad y Cooperación hispano-norteamericano firmado en 1976, establece a favor de los súbditos de los Estados Unidos la exención de todo tipo de impuesto tanto de carácter estatal como local. Estas exenciones continúan vigentes [35]. Desde 1981 el Ayuntamiento reivindica el pago de impuestos municipales que los estadounidenses de la base no pagan, como por ejemplo, el IBI, el de Actividades Económicas, el de Vehículos de Tracción Mecánica o el de licencia de obras. Por poner un ejemplo, en 1993 el Ayuntamiento dejó de ingresar más de 343.000 euros, el equivalente a los impuestos de circulación no cobrados de los vehículos de los residentes de la base (el número de estos vehículos es mayor, algún año casi el doble que el de los vehículos censados ​​para pagar el impuesto).

La localidad se ve perjudicada por la exención de tributos locales, ya que no recibe a cambio ninguna compensación por parte del gobierno español. Esta pérdida de ingresos motivó que el consistorio presentara ante el Tribunal Supremo un recurso contencioso-administrativo contra el gobierno español.

El Ayuntamiento calcula que entre 1984 y 1996 el municipio ha dejado de ingresar más de 34 millones de euros por los impuestos de la base, sin contar los intereses de demora. Aparte de los impuestos mencionados más arriba, el Ayuntamiento tampoco puede cobrar las licencias de las actividades comerciales que se realizan dentro del recinto militar y que no están sujetos a intereses militares como son las pizzerías, los cines, las tiendas, etc.

En 1997 la Audiencia Nacional anuló la orden dictada en 1992 por el ministro de Defensa que eximía a los residentes de la base de abonar el IBI de los locales comerciales (clubes, bares, cines, etc) dentro del recinto militar [36]. Y en 2002 el Tribunal Supremo reconocía el derecho municipal a cobrar tributos por las obras y actividades de la base que tengan carácter civil. En 2005 el Ayuntamiento reclamaba por este concepto 615.000 euros al Ministerio de Defensa, responsable de la exención en el tratado bilateral [37].

Según los cálculos del Ayuntamiento, el Estado, en virtud de una sentencia de 2001, tendría que pagar al Ayuntamiento 1,3 millones de euros por el IBI. También reclama 700.000 euros por el impuesto de vehículos y más dinero por las obras civiles (no militares) realizadas recientemente en el recinto aeroportuario [38]. Se da, además, la circunstancia de que las viviendas ubicadas dentro de la base ocupadas por militares españoles, sí pagan el IBI al Ayuntamiento de El Puerto de Santa María, mientras que las viviendas de los estadounidenses no lo pagan [39].

Peligros y consecuencias

Carrera armamentística

La implementación de un escudo antimisiles de la OTAN y EEUU provocará que sus «presuntos» países enemigos se consideren debilitados en su capacidad ofensiva. Como consecuencia, estos países intentarán mejorar la tecnología militar que permita eludir el escudo y / o fabricarán más armas (el escudo no es infalible y por tanto, un aumento de armas ofensivas implica un aumento de la probabilidad de que una de ellas esquive el escudo). A corto plazo, la reacción puede provenir de países como Irán. Y a largo plazo (cuando el escudo tenga un alcance planetario), la reacción puede provenir de países como Rusia y China. El resultado será un aumento del armamentismo y del gasto militar mundial.

Además, es posible que EEUU, a cambio de su «protección» a Europa, exija más inversión económica militar a los aliados europeos. Todos los secretarios de Defensa estadounidenses critican la poca disposición de los europeos a aumentar su gasto militar.

España se convierte en objetivo militar

La instalación en Rota del escudo antimisiles aumenta el peso de España en la OTAN y, por esta razón, se convierte en un objetivo militar de primer orden para los potenciales enemigos de EEUU, que no lo son nuestros.

De esta manera EEUU logra traspasar a nuestro país una parte de las supuestas amenazas de ataque a sus territorios.

Los mismos militares son plenamente conscientes de esta consecuencia, por ello intentan minimizarla. Dice el general Ballesteros  [40] que la instalación del escudo no supone un cambio sustancial porque «Estados Unidos es un objetivo permanente del terrorismo internacional y España también».

Con la instalación del escudo, la posibilidad de un ataque militar a la zona aumenta. Y por extensión toda la península ibérica se convierte en más insegura.

Desconocimiento del tipo de armamento alojado en Rota

La base de Rota se está ampliando y gana importancia desde el punto de vista militar. Y nos preguntamos si esto no puede suponer un incremento del tráfico de armamento, incluso el nuclear. De hecho, el gobierno español está obligado a autorizar las escalas de los barcos de EEUU sin solicitar información sobre el tipo de armas que llevan a bordo [41]. Por tanto, el gobierno español ignora si transportan armamento nuclear. Además, barcos y submarinos norteamericanos propulsados ​​por energía nuclear hacen escala en Rota [42]. Por otra parte, Gibraltar es un lugar habitual de abastecimiento para los submarinos nucleares británicos y estadounidenses [43]. Si a causa de un incidente fortuito o como consecuencia de un ataque, se produjera un accidente que ocasionara la dispersión de combustible o material nuclear, la bahía de Cádiz se podría convertir en otro Fukushima.

Impunidad de los soldados estadounidenses en territorio español

El escudo antimisiles implica la llegada a Rota de 1.110 militares y 100 civiles estadounidenses.

El convenio entre el Estado español y EEUU sobre cooperación en defensa, firmado en 1988 y modificado por el Protocolo de enmienda [44] de 2002, prácticamente exime al personal estadounidense de obligaciones ante la justicia española en el caso de comisión de un delito (artículos 40 y 44) [45].

Además, en el ámbito internacional, EEUU no ha ratificado nunca el estatuto de Roma y, por tanto, su personal (civil y militar) no está sometido a la jurisdicción del Tribunal Penal Internacional de La Haya.

En definitiva, el estatus de que goza el personal estadounidense posibilita que cualquier delito cometido por soldados o funcionarios pueda quedar impune.

Posibilidad de invalidación del tratado bilateral EEUU-Rusia de reducción de armas nucleares

En la primavera de 2010 Rusia y EEUU firmaron el START II, un tratado bilateral de reducción de armas nucleares. Uno de los acuerdos del Tratado prevé que cualquiera de las partes pueda abandonar el Tratado. El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Lavrov, declaró [46] que si el incremento cuantitativo y cualitativo del potencial de defensa antimisiles de EEUU suponía una disminución sustancial en la eficacia de las fuerzas nucleares estratégicas rusas, Rusia abandonaría el Tratado.

Aunque este Tratado no representa un recorte notable de los arsenales nucleares de ambos países, hay que reconocer que representa un mecanismo de limitación de armamento. Además, incorpora la inspección mutua, que no estaba prevista en los anteriores tratados, y que permite que la limitación sea contrastable. Por lo tanto, si una de las dos partes abandonara el Tratado, desaparecerían estas condiciones de control y supervisión. Y además, se podría retomar una nueva carrera de armamento nuclear.

Primeras reacciones rusas a la implementación del escudo

La declaración del presidente ruso Medvédev [47], a raíz de los primeros pasos de la implementación del EPAA, refuerza nuestras conjeturas y nuestros temores. Transcribimos algunos fragmentos:

«[…] Este plan nos causa una especial preocupación […] EEUU y otros socios de la OTAN no están dispuestos a tener en consideración nuestra preocupación […] un programa que sea capaz de debilitar nuestro potencial de contención […] este programa de defensa antimisiles europea ha comenzado a desarrollarse: se lleva a cabo en Polonia, Turquía, Rumania, España».

Y, como consecuencia, Medvédev decide: Reforzar la protección de las bases de las fuerzas estratégicas nucleares. Equipar los misiles balísticos estratégicos con sistemas de penetración del escudo antimisiles (una parte fundamental se ubicará en la bahía de Cádiz, no hay que olvidarlo). Desarrollar medidas que garanticen, en caso de necesidad, la destrucción de los sistemas de control y de información del escudo antimisiles.

Añade que si las medidas enumeradas no son suficientes, la Federación Rusa desplegará misiles móviles (entre ellos, los misiles Iskander en el área de Kaliningrado) que aseguren la destrucción del componente europeo del escudo. Y termina diciendo que Rusia se reserva el derecho a rechazar posteriores medidas de desarme y de control de armas y apunta la posibilidad de salir del Tratado START. Y el ministro ruso de Asuntos Exteriores, refiriéndose al escudo, subraya  [48] que «estas acciones originan desconfianza y instigan la carrera de armamentos en el Viejo Continente y fuera de sus límites».

No estamos hablando, pues, de peligros imaginarios. La reanudación de una nueva carrera armamentística ya está sobre la mesa.

Consideraciones finales

 La instalación del escudo antimisiles en Rota tendrá muchos efectos negativos para la población de la zona y la del Estado español y ninguno de positivo.

El más grave de todos y que afecta a la población mundial es el incremento de la carrera armamentística. Esto significará, evidentemente, un aumento del gasto militar mundial, que no hará más que agravar la situación de depauperación y recortes sociales extremas que actualmente está sufriendo la ciudadanía de todo el mundo.

La justificación del escudo antimisiles es la protección contra misiles procedentes de Irán y Corea del Norte. Por ahora, ninguno de los dos países tiene la capacidad de enviar un misil a Europa o a los EEUU y el escudo es innecesario. Se deben iniciar relaciones políticas y diplomáticas dirigidas a conseguir una situación de confianza y respeto mutuos. Este es el camino para un futuro que no necesitará escudos de ningún tipo. Hemos visto que, en su estadio final, el escudo debe abarcar todo el mundo occidental (y sus intereses). A medida que el escudo se extienda por un área cada vez más amplia, crecerá el número de países donde generará susceptibilidad y recelo.

El segundo efecto negativo es la situación de peligro directo a que se expondrá la población de la bahía de Cádiz (unas 650.000 personas). En caso de ataque por parte de una potencia enemiga de la OTAN o de EEUU, los ciudadanos serán las primeras víctimas.

Es también muy preocupante el hecho de que, a los buques equipados con el escudo, se les asignará otra función, la de apoyar operaciones de la OTAN y de EEUU en África y Asia. Operaciones que serán presentadas como de protección a la población civil o de exportación de la democracia, como en el caso de Libia, Irak o Afganistán. En definitiva, se acentuará la militarización del Mediterráneo y colocará al Estado español, aún más, en una posición de complicidad con la estrategia belicista del imperio.

El gobierno de EEUU ha manifestado que el escudo protegerá al personal desplazado en las bases que tiene en Europa y en Oriente Medio. Si cerraran dichas bases, no habría que protegerlas.

Creemos que las previsiones del gobierno español sobre un impacto económico positivo son poco realistas. Los puestos de trabajo serán muy volátiles y dependientes de las decisiones de las autoridades estadounidenses y estarán vinculados, directa o indirectamente, a apoyar la guerra. Para albergar el escudo antimisiles, habrá un gasto en incremento de la seguridad y modernización de la base. Este dinero habría que invertirlo en creación de empleo estable y en la consolidación de una economía local desligada de la base militar.

Por otra parte, la instalación del escudo en nuestro país viola claramente una de las condiciones estipuladas por el gobierno español en 1986 para que España entrara en la OTAN. Condición que citamos textualmente: «Se procederá a la reducción progresiva de la presencia militar de los Estados Unidos en España» [49].

Las relaciones internacionales deben basarse en el diálogo, el respeto y la confianza entre las partes y no en la amenaza militar. Por eso seguimos diciendo: ¡OTAN no, bases fuera!

 Notas:

[1] The White House. A «Phased, Adaptative Approach» for Missile Defense in Europe. Fact Sheet, September 17, 2009.

[2] Los misiles se clasifican, habitualmente, atendiendo a tres criterios diferentes.

– Distancia al objetivo

Misil estratégico: destinado a atacar las infraestructuras enemigas lejos del campo de batalla.

Misil táctico: destinado a atacar al enemigo en el campo de batalla.

– Alcance

Corto alcance: menos de 1.000 km

Medio alcance: entre 1.000 km y 5.000 km

Largo alcance (o intercontinental): más de 5.000 km

– Sistema de vuelo

Balístico: trayectoria no modificable

De crucero: trayectoria modificable durante el vuelo

[3] Departament of Defense. Ballistic Missile Defense Review Report. February 2010.

[4]The Phased Adaptive Approach for Missile Defense in Europe Fact Sheet, MDA US Departament of Defense, 17-9-2009, www.mda.mil/system/paa.html

[5] NATO Public Diplomacy Division, Missile Defence Fact Sheet, Press & Media Section, 21 June 2011

[6] Estrategia Española de Seguridad, Gobierno de España. 2011. www.lamoncloa.gob.es

[7] Bureau of Arms Control, Verification and Compliance. U.S. Departament of  State. United States European Phased Adaptative Approach (EPAA) and NATO Missile Defense. Fact Sheet, May 3, 2011.

[8] The Ballistic Missile Defense System, Missile Defense Agency, US Departament of Defense, www.mda.mil/system/system.html

[9] Aegis Ballistic Missile Defense, MDA US Departament of Defense, www.mda.mil/system/aegis_bmd.html

[10] Directory of U.S. Military Rockets and Missiles. Raytheon RIM-161 Standard SM-3. www.designation-systems.net/dusrm/m-161.html

[11] El País, «EE UU desplegará en Rota 1.100 militares y cuatro buques del escudo antimisiles», 5-10-2011

[12] Aegis Ballistic Missile Defense, At Sea, On Patrol. Lockheed Martin, 2010.

[13] Aegis Ballistic Missile Defense. www.lockheedmartin.com/ms2/aegis/abmd.html

[14] Aegis Ballistic Missile Testing. Missile Defense Agency. Fact Sheet 09/2011.

[15] Ronald O’Rourke; Navy Aegis Ballistic Missile Defense (BMD) Program: Background and Issues for Congress. Congressional Research Sevice. CRS Report for Congress. April 19, 2011

[16] Missile Defense Agency. Fact Sheet, Groud-based Midcourse Defense, 07-2011

[17] MLM Division of Israel Aerospace Industries. www.army-technology.com

[18] H. Schneider; «Israel Finds Strength in Its Missile Defenses», The Washington Post. September 19, 2009.

[19] A. Pfeffer; «U.S.: Israeli missile defense system can protect our Mideast bases», Haaretz. 20-06-2011.

[20] Project On Government Oversight (POGO). www.pogo.org/pogo-files/reports/government-corruption/the-politics-of-contracting/

[21] Datos extraídos de las webs empresariales www.lockheedmartin.com, www.northropgrumman.com  y www.raytheon.com

[22] The Washington Post, «William Lynn, Pentagon’s No. 2 civilian, will leave post», July 8, 2011.

[23] RMS President Dr Taylor W. Lawrence Named to DoD Science Board, en www.raytheon.com

[24] El País, «Rota, el escudo del sur», 9-10-2011

[25] La Moncloa. Intervención del presidente en la sede de la OTAN, en Bruselas. 5-10-2011. www.lamoncloa.gob.es i La Vanguardia, «Rota será sede naval del escudo antimisiles y acogerá a cuatro barcos de EEUU», 5-10-2011

[26] El País, «Rota, el escudo del sur», 9-10-2011

[27] Ministerio de Defensa. Nota de prensa. «El gobierno autorizará mañana construir cinco buques de acción marítima». www.defensa.gob.es/gabinete/notasPrensa/2011/07/DGC_11

[28] Enrique Navarro Gil; La transformación de la política de Defensa en España. Información, Defensa y Seguridad, IDS. Noviembre 2011.

[29] El País, «Rota, el escudo del sur», 9-10-2011

[30] Mª del Rocío Piñeiro Álvarez; Guerra y medio ambiente: una historia de la base aeronaval de Rota (desde 1953 hasta la actualidad). Tesis doctoral Universidad de Cádiz, 2002, pág.477.

[31] El País, edición Andalucía, «La base de Rota afronta una nueva reconversión», 23-5-2004.

[32] Mª del Rocío Piñeiro Álvarez; op. cit., pág. 484

[33] Mª del Rocío Piñeiro Álvarez; op. cit., pág. 470

[34] Mª del Rocío Piñeiro Álvarez; op. cit., pág. 491

[35] Según el Artículo 28 y siguientes del Protocolo de enmienda del Convenio de Cooperación para la defensa entre el Reino de España y los Estados Unidos de América. BOE, núm. 45 del 21 de febrero de 2003.

[36] Mª del Rocío Piñeiro Álvarez; op. cit. pág. 474

[37] El País, «El resurgir de la base militar de Rota», 24-4-2005

[38] El País, «Defensa rechaza pagar impuestos al Ayuntamiento de Rota por la base», 26 octubre 2011

[39] «Constantino Méndez, Secretario de Estado de Defensa, perdona el IBI de la Base a los americanos», Socioeconómica, 28-10-2011

[40] El País, «Rota, el escudo del sur», 9-10-2011

[41] Convenio entre el Reino de España y los Estados Unidos de América sobre cooperación para la Defensa. Anejo 3 (Normas  complementarias sobre escalas de buques, norma 7). Además, los barcos «estarán exentos de inspecciones, incluidas las de aduanas y sanidad» (norma 9.3 del Anejo 3).

[42] El País, edición Andalucía, «La base de Rota afronta una nueva reconversión», 23-5-2004.

[43] Diario de Jerez. «El submarino nuclear «Florida» hace escala en el Peñón», 9-4-2011

[44] Protocolo de enmienda del Convenio de Cooperación para la defensa entre el Reino de España y los Estados Unidos de América. BOE, núm. 45 del 21 de febrero de 2003.

[45] Convenio entre el Reino de España y los Estados Unidos de América sobre cooperación para la Defensa de 1 de diciembre de 1988, anejos y canjes de notas, texto revisado por Protocolo de Enmienda de 10 de abril de 2002.

[46] Conferencia de Sergei Lavrov, ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, 6 de abril de 2010. Transcripción en: www.voltairenet.org/article164854.html

[47] Declaración de Medvédev sobre el sistema de defensa antimisiles de la OTAN en Europa. http://actualidad.rt.com/rusia/issue_32764.html, 23 de noviembre de 2011.

[48] Medvédev declara que Rusia puede renunciar al desarme por discrepancias sobre el DAM en Europa. Rianovosti, 23/11/2011, http://sp.rian.ru/international/20111123/151701708.html

[49] BOE núm. 33 Viernes 7 febrero 1986

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12 /

2011

Mas no por ello ignoramos
que también el odio contra la vileza
desencaja al rostro,
que también la cólera contra la injusticia
enronquece la voz. Sí, nosotros,
que queríamos preparar el terreno a la amistad
no pudimos ser amistosos.

Bertolt Brecht
An die Nachgeborenen («A los por nacer»), 1939

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