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Notas

Lucha y ejemplo en Frederick Douglass

Las críticas a la clase gobernante son legítimas

Menudencias de verano

Algo se mueve en Brasil

La fase actual

Las ejecuciones extrajudiciales mediante drones

El error de unos pocos, el sacrificio impositivo de muchos

El nuevo número de identificación de los antidisturbios: un ejemplo más del derecho policial del enemigo

El laicismo y el PSOE

Alguien tendría que dimitir. Carta abierta a la dirección de CC.OO.

Cuaderno de depresión: 22

Percepción catastrofista y acción colectiva progresista

Cuaderno de depresión: 21

Comentarios prepolíticos: 16

¿Qué me importa a mí que la nación sea soberana, si el verdugo me da garrote?

El abuso propagandístico de los valores

Derechos de autor en Internet: un debate complejo

¿Qué alternativas reales?

Una simulación de transición a un modelo energético 100% renovable

La escuela de la ignorancia

¿Lecciones desde Cuba?

Comentarios prepolíticos: 15

Cuaderno de depresión: 20

La modificación de la Ley de Costas

Los indultos del gobierno español durante 2012: un panorama preocupante

Desafíos para el sindicalismo

Ley Wert: Iglesia, empresa y democracia

Construir la alternativa

Una visión distinta del origen del paro

Los afluentes del Duero y las competencias docentes

El Mediterráneo en llamas

Derechos 0 - Beneficencia 1

Hacia un bloque político y social. Algunas insuficiencias

El euro o la vida

Universidad Complutense: relato de un discurso vacío

Financiarización: involución social

Cuaderno de depresión: 19

¿Y si también quebraran los paraísos fiscales?

El proceso de unidad comunista en Cataluña: limando los extremos

Desahucios: el drama de una gran estafa

Comentarios prepolíticos: 14

Cuaderno de depresión: 18

El mercado de las certificaciones: las empresas certificadoras y la universidad

¿Pagan impuestos las grandes corporaciones?

¿Hacia un derecho policial del enemigo?

La principal conversión que los condicionamientos ecológicos proponen al pensamiento revolucionario consiste en abandonar la espera del Juicio Final, el utopismo, la escatología, deshacerse del milenarismo. Milenarismo es creer que la Revolución Social es la plenitud de los tiempos, un evento a partir del cual quedarán resueltas todas las tensiones entre las personas y entre éstas y la naturaleza, porque podrán obrar entonces sin obstáculo las leyes objetivas del ser, buenas en sí mismas, pero hasta ahora deformadas por la pecaminosidad de la sociedad injusta.

Manuel Sacristán Luzón
Comunicación a las jornadas de ecología y política («mientras tanto», n.º 1, 1979)

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