¿Qué otras tragedias tendremos que presenciar antes de que quienes están envueltos en cada guerra comprendan que es un camino solo de muerte, y que la idea de ser vencedores es una ilusión? Porque, que quede claro, ¡con la guerra todos somos derrotados! También quienes no han tomado parte en ella y con cobarde indiferencia se han quedado mirando este horror sin intervenir para llevar la paz.
El arte de volar
Edicions de ponent,
Alacant,
219 págs.
Antonio Madrid
En ocasiones, algún amigo te regala un libro de un género muy distinto al que acostumbras a leer. Yo tengo uno de estos amigos que me regala cómics. Hace un tiempo me obsequió con El arte de volar, guión de Antonio Altarriba y dibujo de Kim (Joaquim Aubert). Me dijo que era muy bueno y la verdad es que lo es. Esta novela gráfica, como la ha llamado algún crítico, explica la historia del padre de Altarriba y al hacerlo narra las vivencias de tantos miles de personas que se vieron arrastradas por la guerra civil y por sus consecuencias. Y entre estas consecuencias, la dificultad de muchos y muchas para llevar una vida digna en una sociedad que instauró la represalia institucional y social. La degradación moral, así como la resistencia a sus efectos, aparece explicada y retratada a lo largo de la obra.
Dice Gervasio Sánchez que las guerras no se acaban hasta que se superan sus consecuencias. Este libro explica sin dramatismos innecesarios esta realidad.
4 /
2011