Sabíamos que las bibliotecas están llenas de tratados de ciencia política que, pese a sus diferentes tendencias, coinciden en considerar oro de ley el dictum aristotélico según el cual «para ser humano hay que tener polis». Lo que faltan son estantes que recojan lo que han dicho y pensado quienes se sitúan al margen y son marginados, ya por convicción, ya por imposición.
Athena Farrokhzad
Mi familia llegó aquí envuelta en la tradición marxista
Mi madre llenó enseguida la casa con figuritas navideñas
Sopesó los pros y los contras de los abetos de plástico
como si el problema fuera suyo
Durante los días distinguía entre vocales largas y cortas
como si el sonido que salía de su boca
pudiera lavar el aceite de oliva de la piel
Mi madre dejó que la lejía fluyera por la sintaxis
Al otro lado del signo de puntuación sus sílabas se volvieron más blancas
que un invierno de Norrland
Mi madre nos construyó un futuro de cantidad de vida
En el sótano de la casa suburbial alineaba latas de conservas
como para una guerra
Por las noches buscaba recetas y pelaba patatas
como si fuera su historia la que estuviera cifrada
en el gratinado de anchoas
Pensar que yo mamé de esos pechos
Pensar que me metió su barbarie en la boca
Mi madre dijo: Tu padre vivió para el día del juicio final
También tu madre, pero fue obligada a otras ambiciones
Mi hermano dijo: Alguna vez moriré en una tierra
en la que las personas puedan pronunciar mi nombre
Mi padre dijo: Una cucharada por los verdugos
una cucharada por los liberados
una cucharada por las masas hambrientas
Y una cucharada por mí
Mi tío materno dijo: Hay algún charco en el que la guerra no se lave sus manos sangrientas
Mi padre dijo: Cuanto más te alejas de la escena del crimen, más fuerte te ligas a ella
Mi madre dijo: Cuanto más cuidas la herida, más duradera se hace
Mi abuela materna dijo: Lo que pierdes en los columpios lo recuperas en el carrusel
Mi padre dijo: Todo lo que escribes se usará contra ti
Mi madre dijo: En su momento todo se volverá contra ti
Mi abuela materna dijo: Dónde está el viento que nos auxiliará
Mi madre dijo: Dónde está la leche que cada respiración exige
Mi padre dijo: Dónde está la tumba que nos hemos cavado
Extractos de Vitsvit (2013)
Traducción del sueco por Rosa Ana Alija
[Athena Farrokhazd es una poeta, dramaturga, traductora y crítica literaria nacida en Irán y criada en Suecia. En 2013 fue la ganadora del Premio literario Karin Boye]
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5 /
2021