La política electoral, si bien no debe desestimarse, no puede ubicarse en el centro de ninguna acción política radical seria, orientada a cambiar las instituciones que sustentan el sistema político, desmantelar las ideologías hegemónicas y fomentar el tipo de conciencia de masas en que habría de basarse un cambio social y político desesperadamente necesario.
El Lobo Feroz
¿Todo será igual?
Cuando esta tragedia pandémica termine o se reduzca. ¿todo será igual que antes o nada será lo mismo?
Como Lobo Feroz, soy inmune al virus, pero temo por los demás, por ejemplo por la redacción de mientras tanto, por sus parientes y amigos, y en realidad por todo el mundo. Desear el mal a alguien no va conmigo. Por algo soy Feroz.
Mucha gente habrá entendido que la sanidad pública, de todos, no es ninguna broma. Hasta el obtuso Trump dejará de contraponerse, es de esperar, al programa de salud de Obama, casi lo único medianamente bueno que hizo ese inútil.
La derecha no había dejado de recortar en sanidad. «Tenemos el mejor sistema sanitario del mundo», mentían. Quizá tuvimos uno bastante bueno, pero lo habían recortado al objeto de fomentar el negocio de la sanidad privada. La derecha «nacional» de España, la derecha «nacional» de Cataluña, el PP gallego… La plaga ha pillado a lo público, digamos, en ropa interior. Se paga mal al personal, de los médicos a los camilleros. Se cerraron quirófanos. Se perdieron camas hospitalarias. Ahora ha faltado y falta de todo.
¿Cerrarán los ejércitos sus laboratorios de investigación de armas químicas y bacteriológicas?
¿Se hará un recuento de quiénes son, en cada país, los muertos por el coronavirus, y a qué clases sociales pertenecen? Mucho parece que los pobres se van a llevar la peor parte, profesionales sanitarios aparte.
¿Habrá aprendido la mayoría de los jóvenes que hay cosas más importantes que los videojuegos y el botellón? Hablo de la mayoría; los concienciados son una minoría tan valiosa como exigua.
¿Dejará la gente de ser analfabeta políticamente? ¿Entenderá que vivimos en un mundo de golpes de estado disimulados —los asesinatos de los Kennedy, la elección primera de Bush, Bolsonaro, Bolivia, los «democráticos» golpes de Ucrania y países bálticos? ¿Se dará cuenta de que no ha habido juicio ninguno, ningún procesamiento, por la caída de las torres gemelas de Nueva York?
¡Ah, los fascismos larvados!
¿Entenderá la gente que se ha permitido la formación de una supersoberanía que manda sobre los estados por permitirse la privatización de las funciones económicas de éstos?
El programa keynesiano adoptado para detener la pandemia, ¿será mantenido para reformar la sociedad y reducir el abismo de las desigualdades? (no es un chiste)
Esta epidemia mundial, ¿anticipa las crisis de naturaleza ecológica que nos aguardan a la vuelta de la esquina?
Por cierto, ¿dónde queda Europa?
Una gran crisis, con shock incluido, no nos la quita nadie.
Ánimos.
28 /
3 /
2020