¿Cómo viven los vivos con los muertos? Hasta que el capitalismo deshumanizó a la sociedad, todos los vivos esperaban la experiencia de la muerte. Era su futuro final. Los vivos eran en sí mismo incompletos. De esa forma vivos y muertos eran interdependientes. Siempre. Sólo una forma de egotismo extraordinariamente moderna rompió esa interdependencia. Con consecuencias desastrosas para los vivos, ahora pensamos en los muertos en términos de los eliminados.
El tamaño de una bolsa
Taurus,
Madrid,
272 págs.
Antonio Giménez Merino
«Nunca he escrito un libro con mayor sensación de urgencia», nos dice Berger en la contraportada de su libro. Y es que el conjunto de aproximaciones personales a la experiencia artística contenidas en esta bolsa de resistencia claman «contra un nuevo orden económico mundial que no puede ser más inhumano», contra la gran mitología de la apariencia que día a día trata de separarnos de la percepción real de cuanto sucede a nuestro alrededor. En tales condiciones, la voluntad de sentirse próximo a quienes padecen que recorre estos ensayos —en el afán de su autor por adentrase en el contexto que envuelve la creación humana— es, para Berger, la condición esencial para reencontrar la dignidad y la esperanza, así como el núcleo de la resistencia al nuevo orden mundial. Mediante un lenguaje comunicativo, repleto de poeticidad y sugerencias, el libro invita al lector a participar en tan singular bolsa.
9 /
2004