La lucha de clases, que no puede escapársele de vista a un historiador educado en Marx, es una lucha por las cosas ásperas y materiales sin las que no existan las finas y espirituales. A pesar de ello, estas últimas están presentes en la lucha de clases de otra manera a como nos representaríamos un botín que le cabe en suerte al vencedor. Están vivas en ella como confianza, como coraje, como humor, como astucia, como denuedo, y actúan retroactivamente en la lejanía de los tiempos.
Manuel Vázquez Montalbán
Ya sé que debería creerme...
Ya sé que debería creerme
lo que pienso cuando siento
o lo que siento cuando entro
en tu cuerpo entreabierto
pero temo morir de fe o de esperanza
y no constatar en el nuevo día
la desolación del tacto y la mirada
ya sé que aburro la distancia
entre tus ojos y los míos
manda
que los cierre y piensa
que no le miro por no verte
y creer en ti.
[De: Praga (1982)]
28 /
12 /
2016