La diferencia fundamental [de la cultura obrera] con la cultura de los intelectuales que tan odiosa me resultaba es el principio de modestia. El militante obrero, el representante obrero, aunque sea culto, es modesto porque, se podría decir, reconoce que existe la muerte, como la reconoce el pueblo. El pueblo sabe que uno muere. El intelectual es una especie de cretino grandilocuente que se empeña en no morirse, es un tipo que no se ha enterado que uno muere, e intenta ser célebre, hacerse un nombre, destacar… esas gilipolleces del intelectual que son el trasunto ideal de su pertenencia a la clase dominante.
La economía desenmascarada
Capitan Swing,
776 págs.
A.R.A
No es un texto de divulgación ni una obra sencilla. Pero es un texto imprescindible para aprender las trampas intelectuales de la economía convencional. Trampas que contaminan nuestra comprensión de la vida económica. Para los que pensamos que la transformación social también pasa por esta creación colectiva que es la ciencia (y por tanto no formamos parte de la tribu que cree que basta haber leído a Marx para tener una visión completa de la economía crítica) se trata de una obra mayor, que sintetiza y explica muy bien críticas e ideas clave a este respecto.
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2016