La política electoral, si bien no debe desestimarse, no puede ubicarse en el centro de ninguna acción política radical seria, orientada a cambiar las instituciones que sustentan el sistema político, desmantelar las ideologías hegemónicas y fomentar el tipo de conciencia de masas en que habría de basarse un cambio social y político desesperadamente necesario.
El Establishment
Seix Barral,
Barcelona,
480 págs.
A. R. A.
Owen Jones vuelve a la carga. Si antes explicó en Chavs el proceso de criminalización y marginación de la clase obrera desarrollado por las políticas neoliberales, ahora trata de presentar un mapa descriptivo de los diferentes componentes del establishment británico. Un entramado de personajes y grupos sociales donde se combinan grandes empresarios, élites políticas, medios de comunicación y think tanks, militares y financieros. O sea, la clase dominante. No se trata a mi entender de una obra redonda. Al basarse en un trabajo de entrevistas periodísticas a veces se pierde el hilo argumental. No resulta del todo claro que empezar el análisis por los ideólogos neoliberales constituya un punto de partida adecuado. Con todo, los méritos predominan sobre las limitaciones. Leyendo sus páginas se toman ideas de cómo construir un esquema parecido para el caso español. Y la descripción del denso tejido de interrelaciones y de conductos que conectan unos sectores con otros (algo bastante más denso y complejo que el simple proceso de “compra” de políticos por parte de las élites) es útil y provechosa. Igualmente recomendable es su reflexión final: derrotar al establishment exige crear una densa red alternativa de movimientos, iniciativas sociales y centros de reflexión. Algo que a menudo nuestra paupérrima izquierda suele olvidar, siempre más dispuesta al sectarismo de todo tipo.
30 /
11 /
2015