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Plataforma Aturem la Guerra

Por la paz, ¡no a la guerra, no impunidad!

Hace un año millones y millones de personas salieron a la calle en todo el mundo para decir NO A LA GUERRA. Y, efectivamente, la guerra no era el camino cuando se bombardeó Afganistán, ni tampoco cuando se invadió Iraq, ni lo es para conseguir una paz justa en Palestina. La guerra nunca es el camino para resolver ningún conflicto en ningún lugar del mundo.

La guerra contra Iraq fue justificada con tres argumentos: la posesión de armas de destrucción masiva, las supuestas relaciones entre Al Qaeda y el régimen de Sadam Hussein y la necesidad de llevar la democracia a Iraq.

Uno de los principales impulsores de esta guerra, Paul Wolfowitz, subsecretario de Defensa norteamericano, declaró el pasado junio en Singapur que el tema de las armas era una «excusa burocrática». También Bush y Colin Powell han reconocido públicamente que nunca han tenido prueba alguna de las relaciones entre el régimen iraquí y Al Qaeda.

El Iraq ocupado dista mucho, en este momento, de ser una democracia y nada hace pensar que en el futuro los iraquíes puedan recuperar la plena soberanía. Sucede, más bien, todo lo contrario: el gobierno norteamericano quiere redactar e imponer una constitución sin participación del pueblo. ¡Esto no tiene nada que ver con la democracia! ¡Esto es colonialismo!

Los verdaderos motivos de la ocupación, tal como dijimos hace un año, son el petróleo, los intereses económicos de las corporaciones multinacionales y los planes geoestratégicos de la administración norteamericana.

Por tanto, todas las razones que Bush, Blair y Aznar dieron para justificar la guerra eran mentira. Lo podemos decir bien alto y bien fuerte: estamos gobernados por una panda de peligrosos mentirosos profesionales y presuntos criminales de guerra.

Un año después, Aznar y el gobierno del PP no asumen sus responsabilidades en esta gran farsa y aún dicen que con su participación hacen una gran contribución a la lucha contra el terrorismo internacional, cuando en realidad su ayuda ha servido para dar cobertura a acciones criminales que generan más atentados y más violencia.

¿Qué clase de gobierno es aquél que, menospreciando a la ciudadanía y aduciendo un conjunto de mentiras, decide participar en una guerra injusta e ilegal y después no quiere dar explicación alguna ni al Parlamento ni a la opinión pública?

¿Qué clase de gobierno es aquél que, con la excusa de la lucha contra el terrorismo nacional e internacional, recorta los derechos y libertades y promueve un clima de miedo y de intimidación que criminaliza la libertad de expresión, el diálogo, el pensamiento crítico y los movimientos alternativos?

Mientras tanto, la situación del Iraq ocupado es caótica. La población tiene graves problemas para satisfacer sus necesidades básicas. La inseguridad y la violencia social, las violaciones de los derechos humanos, las agresiones sexuales y otras formas de violencia de género persisten.

La invasión es la causante de esta situación. Como reacción a la ocupación ha aparecido una red de resistencia y se producen episodios violentos que hacen difícil llevar a la práctica los proyectos de los invasores. Las numerosas dificultades para aplicarlos y la proximidad de las elecciones presidenciales en los EE.UU. hacen que la administración norteamericana, ante el goteo de las muertes de soldados, quiera traspasar las responsabilidades sobre el uturo de Iraq a la ONU y a la OTAN. Y en estas circunstancias no podemos descartar que esta aventura neocolonial pueda acabar en un guerra civil.

Por otra parte, la invasión y la ocupación de Iraq ha ido acompañada de un apoyo incondicional a la política brutal de Sharon contra los palestinos. La llamada Hoja de Ruta ha fracasado y la construcción de un muro que circunda a la población palestina recuerda los «bantustans» de la Suráfrica racista de los tiempos del apartheid.

Desde la Plataforma Aturem la Guerra EXIGIMOS la retirada inmediata de todas las fuerzas militares que ocupan Iraq. La pacificación no será posible hasta que no se vayan los causantes de la actual situación de caos, destrucción y miseria, y hasta que no sean sustituidos -si ello fuese necesario- por fuerzas de interposición de estados que no hayan participado en la invasión.

EXIGIMOS la vuelta inmediata de los soldados españoles. Su papel es secundario y se quiere legitimar como si su misión fuese exclusivamente humanitaria. ¡Los ejércitos de ocupación nunca son humanitarios!

DENUNCIAMOS Y RECHAZAMOS la resolución 1511 del Consejo de Seguridad de la ONU porque no reconoce la soberanía del pueblo de Iraq y legitima la ocupación militar.

EXIGIMOS la devolución inmediata de la soberanía a la población de Iraq y el respeto a la libre decisión de los pueblos que la componen (kurdos, turcomanos, sunitas, chiítas, etc.). Expresamos nuestro deseo de ver algún día en Iraq un estado democrático y respetuoso con los derechos individuales y colectivos.

EXIGIMOS que se abra una investigación sobre los crímenes cometidos contra la población iraquí y que el Tribunal Penal Internacional abra un proceso contra Aznar, Blair y Bush por el crimen de agresión.

EXIGIMOS que Sadam Hussein sea juzgado en un juicio público y que en este proceso sean también encausados Ronald Reagan, Bush padre, Donald Rumsfeld y todos los dirigentes occidentales que dieron apoyo político, diplomático y militar al régimen dictatorial iraquí en los años ochenta.

Dado el procedimiento inconstitucional por el que se decidió enviar tropas a Iraq y dado que la guerra continúa y que las tropas españolas son una fuerza beligerante, EXIGIMOS que los tribunales españoles juzguen al señor Aznar por violación manifiesta de los artículos 590, 595 y 588 del Código Penal.

PEDIMOS a los gobiernos de la Unión Europea que exijan al gobierno de Israel la inmediata paralización y el derribo del muro. EXIGIMOS que se abra un verdadero proceso de paz que ponga fin a la violencia y que se base en el respeto de los derechos legítimos del pueblo palestino. Para llevarlo a cabo, debe producirse la retirada inmediata de las tropas israelíes de Cisjordania y Gaza, así como el desmantelamiento de los asentamientos.

Asimismo, ante la próxima cita electoral del 14 de marzo, la Plataforma Aturem la Guerra vuelve a pedir a la ciudadanía que NO VOTE a los partidarios de la guerra y de la ocupación de Iraq.

Por último, manifestamos nuestra voluntad de seguir denunciando la impunidad de los causantes de esta guerra y de todas las guerras. Llamamos al pueblo de Cataluña a hacer internacional su protesta, tal como hizo el 15 de febrero de 2003, y a participar en la gran manifestación que tendrá lugar el día 20 de marzo (día oficial del inicio de la guerra contra Iraq).

¡FUERA LAS FUERZAS DE OCUPACIÓN DE IRAQ Y PALESTINA!
¡NO A LA GUERRA!

Barcelona 15 de febrero de 2004

3 /

2004

La política electoral, si bien no debe desestimarse, no puede ubicarse en el centro de ninguna acción política radical seria, orientada a cambiar las instituciones que sustentan el sistema político, desmantelar las ideologías hegemónicas y fomentar el tipo de conciencia de masas en que habría de basarse un cambio social y político desesperadamente necesario.

Noam Chomsky
The Precipice (2021)

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