La política electoral, si bien no debe desestimarse, no puede ubicarse en el centro de ninguna acción política radical seria, orientada a cambiar las instituciones que sustentan el sistema político, desmantelar las ideologías hegemónicas y fomentar el tipo de conciencia de masas en que habría de basarse un cambio social y político desesperadamente necesario.
Vicente Navarro
Bienestar insuficiente, democracia incompleta. Sobre lo que no se habla en nuestro país
Anagrama,
Barcelona,
2002,
216 págs.
María Rosa Borrás
Una de las cuestiones más oscuras en el paso de España a la democracia es por qué pervive el atraso en políticas públicas para el ejercicio de los derechos sociales. Se mantiene la distancia con la mayoría de los países europeos argumentando que el peligro está en la quiebra de la Seguridad Social o en la imposibilidad de atajar el paro o en el exceso de inmigrantes, si se quiere conseguir competitividad en los mercados mundiales. Esta obra argumenta la posibilidad y conveniencia, si se examina en largos períodos, de conseguir cohesión social y una elevada competitividad. Además analiza, muy detalladamente, la razón del atraso español en políticas sociales: el subdesarrollo democrático. Este tipo de análisis abre una fecunda perspectiva de comprensión del presente que apunta a la recuperación del pasado sin falsificaciones. Así pues, no se trata sólo de razones de justicia. Romper este pacto de silencio, que ha conllevado una democracia vigilada, es necesario a fin de recuperar un pasado que identifica el origen de determinadas tendencias autoritarias que limitan la democracia. Hay una relación interna entre olvido histórico, democracia incompleta e insuficiencias sociales. Son particularmente los jóvenes quienes necesitan conocer ese pasado histórico inmediato, a fin de conseguir una clara conciencia y cultura democráticas.
5 /
2003