Yo siempre soy y seré partidario de los pobres […]. En el mundo ya no luchan fuerzas humanas, sino telúricas. A mí me ponen en una balanza el resultado de esta lucha: aquí, tu dolor y tu sacrificio, y aquí la justicia para todos, aun con la angustia del tránsito hacia un futuro que se presiente, pero que se desconoce, y descargo el puño con toda mi fuerza en este último platillo.

Número 66 de febrero de 2009
Notas del mes
Crónica desde Belém sobre el Foro Social Mundial
Por José A. Estévez Araújo
La crisis universitaria y Bolonia (II)
Por Juan-Ramón Capella
Por Albert Recio Andreu
ZP y la venta de armas a Israel
Por Eduardo Melero Alonso
Gaza en los medios de comunicación
Por Joaquín Dodero Curtan
La Biblioteca de Babel
John Berger